Esta semana fue rara..venía de estar confundida, deprimida, sin ganas de nada y de repente me empezaron a pasar cosas que me hicieron cambiar de humor.. salí de esa rutina y entendí que lo mejor es que la vida te sorprenda. No esperar nada de nadie, no ilusionarse de nada, no pedir deseos, no pedir favores, mucho menos hacer promesas..todas esas cosas que no nos dejan ver la realidad, y no traen otra cosa más que decepciones. Ya sé que solamente pasó una semana, pero si bien fue poco tiempo me sirvió para aprender a vivir sin esas cosas. Intentando no esperar nada de nadie pero si de mi y de la vida, intentando no ilusionarme para no decepcionarme, intentando no pedir deseos y conseguir lo que quiero gracias a mi y a mis acciones, intentando no pedir favores y conseguir lo que quiero mediante mi propio esfuerzo, intentando no hacer promesas y sólo darle mi confianza a la gente que en verdad lo merece. Así la vida es mas real, porque las cosas buenas le pasan a la gente buena, porque las cosas buenas no llueven del cielo, se consiguen con el sudor propio..Puede parecer tonto pero en una semana la vida me sorprendió, me dejé llevar, chau rutina, chau preocupaciones, chau decepciones. Mi realidad la elijo yo, no los demás.