Resulta que ciego no soy, sé de donde vengo y sé a donde voy.
Sé que no estoy hablándole a las piedras, aunque pareciera que a veces sean ellas las que más me entiendan, y atiendan, su atención por un pan, yo vengo ofreciendo docena y no sé donde están.
Seguro pensando en el medio más subliminal, aquél que te dejó con ese falso meditar.
Dices que me escuchas, y no me escuchas, si me escucharas comenzaría tu lucha.
Dices que tú ves, y lo único que ves es como desaparece tu salario a fin de mes.
Tú cara no parece reflejar entendimiento, discúlpame, pero eso es lo que siento, hablándote de lo que está sucediendo, hay algo que no entiendo.
No sé supone que fuimos creados con discernimiento, para separar lo falso de lo cierto y desechar lo mal que te esté haciendo.
Que es lo que ellos te hicieron que pasó que quedaste así? Sin luchar por ti, sin poder ver ni oír.
Dime quien fue el que te hizo esto, dime quien te dejó así? Tan lejos de mi, sin poder ver ni oír.
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